Itinerario de Viajes: Una semana en El Salvador
El Salvador es un pequeño Estado de América Central que por su posición estratégica mantiene estrechas relaciones diplomáticas con Estados Unidos, tanto que su moneda es el dólar americano, pero la lengua oficial es el castellano al haber sido colonizado por España.
La capital San Salvador es la ciudad más poblada del país y es también su centro cultural, económico, político, financiero y educativo. Aquí se pueden visitar la Casa Presidencial, el Palacio Nacional, la Catedral y el Monumento al Divino Salvador del Mundo que representa esta nación y sus habitantes en todo el globo. Aquí cerca se encuentra el Parque El Boquerón, en la cumbre del volcán San Salvador, a 1800 metros sobre el nivel del mar. La atracción principal es el cráter de 5 kilómetros de diámetro que llega a los 500 metros de profundidad. En su interior se encuentra otro más pequeño llamado por eso el Boqueroncito. Durante todo el año aquí la temperatura se mantiene fresca y es el ambiente ideal para que crezcan muchas plantas ornamentales, como los cartuchos, las begonias y las sultanas. Del mismo modo, aquí viven animales como el armadillo, el mapache, el ciervo y el zorro. Además, se puede recorrer todo el perímetro del cráter a través de rutas de senderismo para todos los niveles.
Santa Ana es la segunda ciudad de San Salvador por dimensión e importancia, a 64 kilómetros de la capital. Los lugares más interesantes son la Catedral de estilo neogótico y la caldera del Coatepeque donde se ha formado un lago que lleva el mismo nombre. Cerca de aquí se encuentran fuentes termales de agua caliente y en el centro está la isla de Teopan, de gran importancia religiosa en la época maya.
Para volver a la atmósfera colonial, es necesario visitar Suchitoto, un pequeño pueblo en el departamento de Cuscatlán conocido por sus calles de adoquines y su iglesia. Además, desde aquí se puede admirar un lago artificial, el Suchitlán. Este es uno de los lugares favoritos por los salvadoreños para sus fines de semana por la tranquilidad pero también por la amplia oferta cultural, con galerías de arte, centros culturales y artesanales. Otra destinación para volver atrás en el tiempo es San Vicente, fundada en el siglo XVII debajo de un árbol que sigue vivo, el Tempisque. Aquí tampoco faltan eventos culturales y casi todos tiene lugar en el Parque Cañas, sobre todo los festivales gastronómicos que se celebran casi todos los meses.
Otro salto temporal se puede emprender en Tazumal, un sitio arqueológico de la época precolombina en Chalchuapa donde se encuentran restos de edificios maya, así como artefactos de metal, esculturas y tumbas. Este lugar es parte de un complejo más grande que abarca otras ciudades antiguas y que también se pueden visitar, como Kaminaljuyu y Alumulunga.