Los SI y los NO cuando preparas tu maleta para viajar
Uno de los mayores problemas cuando viajamos es la preparación de la maleta. Para evitar traer todo el armario y olvidar los objetos necesarios, hay que seguir unas sencillas reglas que valen para cualquier tipo de viaje, sobre todo si hay que reducir el peso de la maleta para no tener que facturar y pagar algo más.
La primera regla es que cada uno tiene que cuidar del espacio de su propia maleta, así que si algo no cabe en la tuya entonces hay que arreglar la cuestión, y lo mismo pasa con las cosas de los demás. Por esta razón, es necesario hacer un listado de los objetos imprescindibles, para tener todo controlado, también para no olvidarse nada en el viaje de vuelta. De esta manera podéis controlar cuánta ropa vais a traer. Otro consejo para visualizar de la manera más efectiva el contenido es ponerlo todo en la cama. Para no exagerar con la ropa, es fundamental tener en consideración la destinación y el tipo de viaje. Por ejemplo, si vais a hacer senderismo, un vestido de gala no os va a servir para mucho. De la misma manera, podéis preparar ya unos outfit para no arriesgaros con los típicos «por si acaso». Si os preparáis ya todo de antemano, y si también os lleváis prendas que quedan bien en varias combinaciones, vais a encontrar la solución para cualquier ocasión sin meter el armario en la maleta.
Otra cuestión importante son los zapatos. Como en el caso de la ropa, hay que tener en cuenta el tipo de viaje que váis a afrontar, aunque sería bien tener dos pares de zapatos: uno es el que utilizáis durante el viaje y tendría que ser el más cómodo, y otro que también será cómodo pero que puede quedar bien con el tipo de ropa que habéis puesto en la maleta. Para ahorrar espacio y no arrugar las prendas, es mejor poner cada zapato en dos bolsas separadas en el fondo. Otra solución para que la ropa no se arrugue es evitar doblarla y preferir hacer rollos, aunque hay diferentes opiniones sobre este método. Sin embargo, la única regla segura es empezar poniendo las prendas más pesadas en el fondo, como los vaqueros, los pantalones, los jerséis, etc.
Por lo que concierne el maquillaje y los productos de higiene, es preferible optar por los botes de viaje que hoy en día se pueden comprar en cualquier supermercado. Además, podéis comprar unos kits en varias tiendas y quedaros con los botes, utilizando de esta manera vuestros productos preferidos durante los viajes siguientes. De todas formas, muchos hoteles ofrecen champú y jabón, así que, si no tenéis problemas de piel, podéis superar este punto. Tendréis más espacio y sobre todo la maleta será más ligera. Por lo que concierne el maquillaje vale la regla de la ropa: pensar de antemano lo que se utilizará sin duda. Para evitar que el contenido de los neceseres se rompa durante el viaje, se aconseja ponerlos en el medio de la ropa, o, si ya no cabe más, poner los botes sueltos para rellenar los huecos. Además, es preferible optar por botes de plástico, porque el cristal se podría romper con más facilidad, y también pesa más.
Finalmente, es aconsejable llevar pocos objetos y poca ropa para viajar más ligeros también en la mente, desprendiéndonos de lo superfluo y centrándonos en el viaje que os espera sin preocupaciones.