Consejos para viajar en invierno
Los viajes en invierno pueden dar un poco de pereza. Entre el frío y la cantidad de ropa que tenemos que poner en la maleta, a veces preferimos quedarnos en nuestros hogares calentitos. Sin embargo, también los viajes de inviernos pueden regalar muchas emociones. Solamente hay que seguir algunos sencillos consejos.
Por lo que concierne los desplazamientos, es aconsejable calcular un margen mayor de tiempo por las condiciones atmosféricas que a veces pueden ser extremas o simplemente retrasarnos un poco. En el caso del coche, es mejor conducir despacio, manteniendo las distancias y poniendo toda nuestra atención en la carretera. Por si habrá atascos, es mejor quedarse con alguna prenda calentita en el habitáculo, así como algo para comer y beber. Por lo que concierne los viajes en avión y en tren, vale la misma regla, dado que las conexiones podrían retrarsarse.
Por lo que concierne la maleta, también en invierno se puede viajar ligeros. La solución es elegir prendas que juegan bien en distintos outfit. Para que el resultado no sea aburrido, podéis traer accesorios que os den un toque más. Esto vale sobre todo por bufandas, guantes y gorros. La cuestión más difícil son los zapatos. Para los desplazamientos se aconseja llevar los más cómodos y también los que os abrigan más, pero podéis también tener otro par de zapatos un poco más elegante.
En muchos países se abusa de la calefacción, aunque en el exterior la temperatura podría encontrarse muchos grados bajo cero. Para evitar caer enfermos y estropear vuestro viaje, se aconseja vestirse por capas, como una cebolla. Por debajo podéis llevar una camiseta, luego una sudadera o un jersey que os podéis quitar y poner sin muchos problemas. Lo mismo vale por el abrigo, que tiene que ser versátil por cualquiera ocasión y sobre todo tiene que abrigaros bastante sin impedir vuestros movimientos.
Para que la maleta no pese demasiado y sobre todo que se pueda cerrar, es aconsejable llevar puestas las prendas que ocupan más espacio. Esto vale tanto por los zapatos como por la ropa. Iréis más abrigados y cómodos y no tendréis que preocuparos ni por vuestra salud ni por el peso o la dimensión de la maleta.