Viaje de Navidad: Donde esquiar en España
A menudo, cuando los turistas piensan en España, en seguida la asocian a sol y playa. Sin embargo, este país puede ofrecer también varias metas para el turismo de invierno, con importantes estaciones para esquiar.
La zona montañosa más frecuentada es la Sierra Nevada (www.cetrusa.es), que consta de un primato: es la estación más meridional de toda Europa. Por su altitud (3000 metros) y su posición (Güejar Sierra, Granada), desde allí se puede llegar a ver el mar en los días más límpidos. Tiene 79 pistas, casi todas de mediana y alta dificultad. Para los que todavía no se sienten seguros en la nieve, aquí se puede acceder a Dreamland, con una atención sobre todo hacia los niños.
En los Pirineos catalanes, en el Valle de Arán, se encuentra Baqueria – Beret (www.baqueira.es). Tiene un desnivel de más de 1000 metros pero aquí casi todas las pistas son de dificultad baja o moderada, llegando hasta 108 kilómetros de extensión.
Siempre en Lérida podemos esquiar en Boí Taüll (boitaullresort.com), de pequeñas dimensiones pero que ofrece varias actividades, como alquiler de motos de nieve, senderismo y esquí de fondo. Además, tiene una escuela de esquí para niños y un club infantil, para que los padres se puedan relajar y dedicarse al deporte sin preocupaciones y acompañarse con los hijos en cuanto aprendan a esquiar.
Siguiendo en los Pirineos, pero en Huesca, podemos pararnos en Formigal (www.formigal.com), con más de 90 pistas, pero la mayoría están dedicadas a expertos, así que no es una meta para todos. Sin embargo, es una de las más organizadas para los niños, con un jardín de nieve para hasta 100 niños y el Portalet Park, donde visitar un iglú y un poblado indio. Un poco de cultura y entretenimiento en el medio de la nieve y del deporte.
Quedándonos en la misma provincia, podemos movernos a Cerler (www.cerler.com), de dimensión más modesta pero siempre dedicada a expertos y con un desnivel considerable.
Las estaciones de esquí de España son entre las mejores de Europa, según la opiníon de los más aficionados. Así que solo hay que decidir una meta, poner los esquís en los hombros y salir. Además, es también una ocasión para conocer una parte de España y de sus paisajes diferente de la más visitada por los turistas.