5 formas de ahorrar para tener una luna de miel
La luna de miel es un momento importante para una pareja que empieza una nueva vida o que, si ya está viviendo bajo el mismo techo, quiere tomarse un tiempo para ella sola. Por esta razón, no hay que renunciar por falta de dinero. Solo hay que meter en práctica 5 simples consejos.
1. Hacer un presupuesto y atenerse a él. A cualquiera le apetecería un viaje al otro lado del mundo, o seguir los pasos de los amigos o de la familia, pero hay muchos lugares maravillosos medio desconocidos y a la vuelta de la esquina. ¡Solo hay que buscarlos!
2. Pedir donaciones. Si ya estáis viviendo juntos o si no necesitáis nada para la nueva casa, podéis pedir que el dinero que vuestros invitados habrían gastado en regalos inútiles, pasase a cubrir los gastos de vuestro viaje.
3. Vender lo que no necesitáis. Probablemente, haciendo la mudanza, os abréis encontrado con un montón de cosas olvidadas o que ya no váis a utilizar, así que podrías venderlas y con el dinero recaudado pagar parte de la luna de miel.
4. Buscar viajes todo incluido, para no tener que preocuparos de los gastos del momento. Si os apetece la idea y si tenéis invitados animados y aventureros, podríais planear una boda en el mismo lugar y eligir vuestra luna de miel.
5. Planear el viaje. Conociendo ya de antemano las etapas y haciendo un presupuesto de los posibles gastos , no os encontraréis con sorpresas desagradables y timos. Si posible, es aconsejable reservar ya museos, visitas guiadas, rutas, desplazamientos, para salir de casa con la mitad de los problemas solucionados y vivir con más serenidad el resto de la experiencia.
La luna de miel no es un viaje cualquiera, sino que es EL viaje, el arranque de la vida de una pareja. Sin embargo, el consejo más importante para que todo salga bien es relajarse y disfrutar y dejando paso a la fantasía para encontrar soluciones juntos a los pequeños problemas que se podrían encontrar en el camino.