Escapada de fin de semana en Santiago de Compostela, Galicia
Cuando se oye el nombre de Santiago de Compostela, la mente vuela hacia el Camino que lleva hasta esta ciudad. Sin embargo, es un lugar que tiene mucho que ofrecer, gracias a su atmósfera de ensueño y de religiosidad. Vamos a descubrir cuáles son los lugares imprescindibles para vivir una experiencia inolvidable aunque tengáis a disposición poco tiempo, simplemente para hacer una escapada de fin de semana.
Por su importancia histórica, cultural y artística, el casco antiguo es patrimonio de la humanidad de Unesco. Por supuesto, la primera etapa será la Catedral dedicada al Apóstol patrón de España. Muy habitual es el abrazo a Santiago, un verdadero abrazo que se da a la estatua de éste que se encuentra justo detrás del altar mayor. Bajando por unas escaleras, se puede acceder a la tumba donde está enterrado junto a dos discípulos. Obra símbolo de la Catedral es el Pórtico de la Gloria, llevado a cabo por un personaje emblemático y desconocido llamado Maestro Mateo. Durante la misa, sobre todo las misas de los peregrinos, una parte emocionante es la del botafumeiro, al final de la celebración. Se trata de un incensario alto 1,6 metros por 60 kilos que oscila por el crucero, llegando a los 60 km por hora. En la misma Plaza del Obradoiro, donde se puede admirar la fachada principal de la Catedral, se encuentran el Palacio de Rajoy, sede de la Junta de Galicia, y el Hostal de los Reyes Católicos. En los oportales del Palacio, sobre todo en verano, será una experiencia inolvidable asistir a los cantos de los tunos, unos músicos que siguen una antigua tradición universitaria. Poco más allá, en la Rúa do Franco, está el Palacio de Fonseca, sede la Biblioteca Xeral, que a menudo ofrece exposiciones de fotografías sobre distintos temas.
Para conocer mejor la cultura gallega hace falta visitar los museos de Santiago. El primero es el Museo do Pobo Gallego, en el Convento de Santo Domingo de Benaval, donde también se puede entrar para gozar del jardín público. Aquí están expuestos varios artefactos relacionados con la vida cotidiana de la Galicia de varias épocas y de varias zonas, tanto del interior como de la costa. Otro lugar emblemático, más por su estructura que por su función, es la Ciudad de la Cultura. Se encuentra un poco más alejado del casco histórico, en una colina que domina Santiago. Su diseño recuerda el mapa de la parte antigua de la ciudad y aquí se organizan varios eventos de tipo cultural, como conciertos, exposiciones, proyección de películas, etc. Sin embargo, el proyecto queda incompleto por el alto coste que ha supuesto durante la crisis económica.
Volviendo al casco histórico, imprescindible es pasear por sus calles, para volver atrás en el tiempo y sentirse en otra época. Para probar la gastronomía típica de Galicia se aconseja escoger uno de los muchos restaurantes de la turística Rúa do Franco o también de la Rúa do Vilar. No os podéis perder el pulpo a feira con una copa de albariño, así como la tarta de Santiago como postre. Visitar Santiago os cambiará la vida.