Estambul en el Puente de Diciembre
Aunque en invierno las temperaturas caigan por debajo de los cero en Estambul, seguramente merece la pena pasar los días del puente de diciembre en esta ciudad cosmopolita, dividida entre Europa y Asia. La ciudad ofrece una gran variedad de alojamientos para todos los bolsillos y, aunque los precios han aumentado rápidamente en los últimos años, todavía es posible encontrar habitaciones en hoteles céntricos a precios mucho mas asequibles que en las otras ciudades europeas.
En cuanto a los lugares de interés, la zona donde hay una mayor concentración de monumentos es la de Sultanahmet. Aquí se encuentra la basílica de Santa Sofía, el Palacio de Topkapi, la Cisterna de Yerebatan con las columnas romanas y egipcias y la mezquita Azul, la única con seis alminares. La ciudad posee un gran número de mezquitas y todas tienen la misma estructura, con su originales colores de la luz y de las paredes.
Bajando hacia el puerto se encuentra el famoso Gran Bazar, llenos de comercios sin fin, la mezquita de Fathi y la universidad. Del Puerto de Eminonu, siempre muy animado, salen todos los barcos para las visitas turísticas por el bósforo.
Como decíamos antes, la ciudad se encuentra entre dos continentes: Europa y Asia. El barrio Europeo se caracteriza por la calle Istikal cadessi, la torre Galata, el hotel Pera, una iglesia cristiana, un monasterio donde bailan los derviches y la plaza taksim con el monumento a Ataturk. Este barrio representa uno de los mejores lugares para descansarse un rato, dado que aquí se encuentra un montón de restaurantes y cafeterías. En el lado asiático de la ciudad podéis disfrutar de uno de los mejores atardeceres del mundo. Dando un paseo por las orillas asiática se puede admirar el tan famoso perfil de la ciudad con sus mezquitas, como tenían que verlo nuestros antepasados llegando en barco a la antigua Constantinopla. La ciudad turca fue capital de distintos imperios a lo largo de la historia: del Imperio romano, del Imperio bizantino, del Imperio Latino y del Imperio otomano.
Estratégicamente situada entre el Cuerno de Oro y el mar de Mármara en el punto de encuentro de Europa y Asia, la Constantinopla bizantina fue baluarte de la Cristiandad y heredera del mundo griego y romano. No os olvidéis del puente Gálata, con sus lugares típicos y restaurantes con terraza, ideales para una cena con vistas.
Si buscáis la movida y un lugar muy animado por las noches, tenéis que dirigiros hacia el barrio de Ortakoy o el puerto pesquero de Karakoy, considerado el barrio de comerciantes en el época otomana.
Otros consejos para pasar unos días de puente inolvidables en la ciudad turca es dar una vuelta en el bus turístico, pasando por las antiguas murallas de la ciudad, ir a un Hamman, lugar de relax y encuentros, asistir a un espectáculo con cena de la danza del vientre, como el famoso Restaurante Orient House, y al show de los heladeros en los alrededores de Istikal.
Otros sitios de interés son el Pierre Loti Café, sobre el Cuerno de Oro (Haliç), donde se puede subir en teleférico o andando por el inmenso cementerio hasta la cima, las Islas Príncipe, para ver las casitas otomanas, armenias, griegas. Desde la parte europea, el barco se coge en Kabatas, desde la orilla asiatica se puede ir desde Kadikoy o desde Bostanci. No os olvidéis el Paseo marítimo de Moda, en la zona asiática, la Torre de Leandro, situada en medio del mar, la Fortaleza rumi (Rumeli Hisari), un castillo maravilloso en la parte europea del bósforo en la zona de Bebek, a la que se puede llegar en bus desde Taksim y desde Besiktas.
Por ultimo, si queréis convertir vuestro puente de diciembre en algo espectacular, no dejéis de visitar el parque temático de Miniaturk, inaugurado hace poco tiempo, donde se pueden admirar las miniaturas de los monumentos más importantes de Estambul y el resto de Turquía.