Itinerario de viaje de Fin de Semana en Cerdeña
Cerdeña es una de las dos islas mayores de Italia. Es conocida sobre todo por ser una de las destinaciones más bonitas para el turismo de verano, por sus playas y sus aguas turquesas. Sin embargo, también la parte más central tiene mucho que ofrecer. Vamos a descubrir cuáles son los lugares imprescindibles para vivir una experiencia inolvidable.
Lo primero que habría que visitar es la capital de la región, Cagliari. Aquí se pueden recorrer sus calles admirando la arquitectura hispánica. De hecho, esta isla por muchos siglos estuvo dominada por la corona española. Los edificios más importantes son el Santuario de la Madonna di Bonaria en la homónima plaza, el Claustro Santo Domingo en plaza Santo Domingo, la iglesia de Santiago en plaza Santiago y la capilla aragonesa en la Catedral de Santa María del Castillo en plaza Palazzo. Para seguir con el tema histórico, pero yendo más atrás en los siglos, se aconseja visitar las tumbas de los gigantes, es decir monumentos por sepulturas colectivas de edad nurágica, remontando así al II milenio a. C. Se pueden encontrar en casi toda Cerdeña, pero se nota una concentración en la parte central, entre Oristán y Sássari.
Pasando a la parte medioambiental, la isla tiene mucho que ofrecer, como el Archipiélago de la Maddalena, en aquella zona conocida como Bocche di Bonifacio, en la parte septentrional. Entre las islas más importantes se encuentran aquí La Maddalena, Caprera, Santo Stefano, Budelli, Santa Maria, Razzoli, Spargi, además de muchos islotes. Por su importancia, se ha instituido un parque nacional. Dignas de una visitas son Caprera, donde murió Garibaldi, y Santo Stefano.
Por quienes aman la vida mundana, el lugar perfecto es la Costa Smeralda, frecuentada por los más ricos del mundo. Se encuentra siempre en la parte norte de Cerdeña y su corazón son Porto Cervo junto a Porto Rotondo. Si no os podéis permitir gozar de las instalaciones de estas destinaciones de lujo, os podéis desplazar hasta Santa Teresa di Gallura. Aquí no faltarán playas caraíbicas, pero tampoco los sitios de interés cultural e histórico, como la torre española que se ha convertido en símbolo del pueblo, los nuragas de Lu Brandall y Sa Testa de la edad del bronce y la batería Ferrero compuesta por ruinas militares de la Segunda Guerra Mundial.
Pero no hay que olvidarse de la gastronomía de Cerdeña que, como la italiana en general, tiene mucho que ofrecer. Si sois amantes de las más clásicas pizza y pasta, todos los restaurantes pueden ofrecer algo con ello, peo también merecen la pena los varios platos típicos, casi todos a base de pescado y con ecos aragoneses. Sin embargo, la cocina de la isla, tiene también una tradición de pobreza y pastoral, con platos como los gnocchi de trigo duro, la fregula, la panada, il porceddu, lo zurrette, l’ispinada, sin olvidar el pan carasau o pan frattau y los amarettos. El digestivo alcohólico más popular de Cerdeña es el mirto, por la gran presencia de esta planta en toda la isla. Además, con ella se producen varias esencias, un regalo perfecto para acordaros de este lugar tan único al mundo.