Que hacer un fin de semana en Bruselas
Bruselas, la capital de Bélgica es una elegante ciudad que tiene mucho que ofrecer en términos de atracciones y bellezas histórico-artísticas. Esta ciudad fue para mucho tiempo subestimada desde el punto de vista turístico, actualmente por el contrario está recibiendo el justo mérito gracias al hecho de convertirse en centro de la Comunidad Europea. Esta ciudad es muy compacta, por lo tanto es posible visitarla en pocos días, aunque se pueden encontrar a cada ángulo maravillosas bellezas artísticas, que procuran visitantes que revuelven todos los años. Ofrecemos las cosas más bella que se deben absolutamente visitar durante un fin de semana en la fantástica Bruselas.
La plaza principal llamada Grand Place y declarada Patrimonio Mundial del UNESCO. Se le considera una de los lugares más bonitos de Europa para los espléndidos edificios que la rodean: entre estos podemos encontrar la casa de los comerciantes, la de los cerveceros, la de los modistas e incluso la de los pintores, donde en 1852 vivió Víctor Hugo. Cada dos años, durante el mes de agosto, en este espléndida plaza se asiste a un espectáculo que atrae turistas de todo el mundo, ella en efecto se cubre de un enorme alfombra de flores maravillosos, por la alegría de todos los turistas que llegan en Bruselas.
Símbolo para excelencia de la ciudad: el Mannequin Pis, una pequeña estatua en bronce que representa a un niño que hace pipí. Esta estatua recuerda la leyenda de un niño que salvó la ciudad haciendo la pipí sobre la mecha de una bomba.
El Museo del Chocolate en el que se puede admirar como se realizan las famosas garrapiñadas de chocolate y probar el gusto de esta espléndida comida encantándose con degustaciones.
Bruselas es la patria incluso de los tebeos para los cuales se puede visitar el Museo del Tebeo, aunque si realmente la ciudad misma es un museo, puesto que se instituyó un verdadero curso turístico denominado «Recorrida del tebeo» formado por 30 murales gigantes y que envuelve toda la ciudad de Bruselas.
Para los amantes de los postres, se puede admirar las numerosas y famosas chocolate de Bruselas, para probar y disfrutar los fantásticos «gaufress» (o waffel), y los barquillos que se cocinan sobre la rejilla y se sirven con crema, Nutella y mermeladas.
Lugar de culto y también centro importante de la ciudad es la Catedral gótica de San Miguel y Gudule, que a su interior contiene el maravilloso púlpito barroco de Adán y Eva tallado por el escultor Hendrik Frans Verbruggen.
Acerca de esto se puede encontrar y visitar el museo real de Bonito Arti que contiene en sí otros 4 distintos museos, puesto que pasan desde la historia antigua hasta la historia moderna. Todos los dos museos se encuentran dentro de un espléndido palacio en estilo neo-clásico en el centro de la ciudad de Bruselas. Entre un museo y otro no se puede no probar el «moules et frites», es decir moldes y patatas fritas, este es un plato muy bueno y super calórico al cual no se puede resistir, sobretodo acompañado de una deliciosa cerveza local.
Por fin no puede faltar la visita al Atomium, una estructura que se encuentra en la periferia septentrional de la ciudad y que se elabora sobre el parque Heysel gracias a su altura, de bien 102 metros; está formada por 9 esferas del diámetro de 18 metros que forman los átomos de un cristal de hierro y que pueden recibir exposiciones, encuentros y también fiestas privadas.
Si viajes con los niños, aconsejamos de visitar en la misma zona el a Bruparck el parque pasatiempos que recibe incluso la pequeña-Europa con más de 300 reproducciones en miniatura de todos los famosos monumentos arquitectónicos europeos.