Razones por las que deberías enamorarte de una persona que viaja
Hay un montón de razones para enamorarse de una persona que viaja. Los viajeros no son seres humanos comunes sino personas realmente especiales, que tienen carisma y desprenden un encanto único. Y entonces vamos a descubrir los motivos por los que es aconsejable enamorarse de una persona que viaja. Para empezar una persona que viaja es naturalmente curiosa, no se aburre y no tiene miedo de enfrentar lo inesperado: viajar significa mantener mente y corazón abiertos a nuevas experiencias y necesita una notable capacidad de adaptación.
Un viajero es lleno de entusiasmo y de energía pura: vive en modo intenso y positivo, imaginando el mundo como un parque maravilloso que puede ofrecer opciones infinitas. Es capaz de viajar con su cuerpo y con su mente, deseoso de conocer todas las maravillas que existen: paisajes, monumentos, mares y montañas, música, cine, lectura y arte forman parte integrante de su vida.
Por otro lado explorar el mundo ofrece muchos momentos de soledad y reflexión, que permiten conocer bien a si mismos, aprendiendo a afrontar mejor los imprevistos que se encuentran. Por lo tanto un verdadero viajero está dotado de gran sentido práctico y no se rinde ante las dificultades: además ama aprovechar su tiempo da la mejor manera posible, sin gastar inútilmente energía en discusiones inútiles y sin lamentarse por tonterías!
Es fácil enamorarse de un viajero, que siempre tiene aventuras únicas y fascinantes que contar. Te hablara de sus encuentros con los tiburones en las profundas aguas de la islas Seychelles, te narrará de sus emocionantes Safaris en Sudáfrica en medio de los leones y de la vez en que fue bloqueado por una tormenta de arena en el desierto marroquí. Se puede decir que con un novio viajero es imposible aburrirse: siempre estará listo para nuevas aventuras, también cerca de casa! Una característica del viajero es la capacidad de experimentar aventuras en cualquier lugar! Hasta un simple viaje en tren puede ser el mas divertido en compañía de la persona justa!
Otro motivo para enamorarse de un viajero es este: una persona que viaja no tiene miedo a ser independiente: estará contigo porque realmente lo quiere y no porqué lo necesita. Quien ha caminado en todo el mundo sabe cómo afrontar las pruebas de la vida y ha aprendido a ser autosuficiente. Al mismo tiempo un viajero no pierde nunca su capacidad de asombro, permaneciendo ilusionado y puro como un niño. Y que hay de mas romántico de un niño, que además es muy fuerte y sabe cuidar de sí mismo?
Un verdadero viajero posee muchas otras virtudes: es una buena fuente de planes, es generoso, tiene una vasta cultura sino que es humilde, sabe manejarse con el dinero, ha vivido muchísimas experiencias que lo han hecho capaz de comportarse bien en cualquier situación. Un viajero no te juzgara gratuitamente: ha conocido diferentes personas y culturas y sabe respectar otra forma de comportarse. Una persona que viaja piensa positivo, tiene confianza en la humanidad y cree que el mundo es un lugar maravilloso.
Pero sobre todo un viajero tiene su mente abierta al cambio y te sorprenderá siempre, queriendo que tu sientas su misma emoción frente a una playa, una cascada o un monumento histórico: te convertirá en su amado compañero de aventuras en todo el mundo. Por último deberías enamorarte de una persona que viaja porque siempre estará lista a cumplir tus deseos y cualquier idea loca que tengas en la mente! La vida misma es un largo viaje lleno de aventuras. Y entonces porque no vivirla al máximo al lado de una persona positiva, capaz de apreciar su belleza y su poesía?
