Viaje de Navidad: Invierno en Marbella, España
Una de las ventajas que atraen los turistas en Andalucía es el clima que se mantiene agradable hasta en invierno. Por esta razón, es una de las metas favoritas durante las vacaciones de Navidad. En particular, Marbella resume lo que un visitador desea durante este periodo del año: el sol, la playa, la tranquilidad y la elegancia. Esta pequeña ciudad nada tiene que ver con la movida y los excesos de otras ciudades de la Costa del Sol. Aquí nos podemos relajar, recargar las pilas y también calentarnos un poco.
No es un caso que la mayoría de los turistas llega de países nórdicos, dado el sol aquí luce 320 días al año. La actividad más practicada es sin duda caminar por el paseo marítimo, que mide 10 kilómetros y que une los puertos más conocidos: el Banús y el San Pedro de Alcántara. Además, para los que saben conducir un barco, aquí se pueden alquilar y hacer un recorrido por la costa, quizás adentrándose hasta Gibraltar para disfrutar de una de las vistas más impresionantes de esta zona. Para los más activos, Marbella cuenta con varios golf clubs, tanto que ahora se ha pasado a llamar la «Costa del Golf». Este deporte se puede practicar en el Alhoa Golf Club, en Las Brisas y en Los Naranjos, todos diseñados por importantes antiguos campeones, así que se podrán disfrutar a tope y cada uno podrá demostrar su habilidad.
Esta ciudad ofrece también muchas actividades culturales. Lo primero que se puede apreciar aquí es la gastronomía, que se puede disfrutar en las terrazas y en los chiringuitos, siempre gracias al clima favorable. Además, por su posición, cada día se podría organizar una excursión diferente para descubrir las ciudades cercanas, como por ejemplo Málaga, Estepona, Ronda y hasta Sevilla y Granada. Para los amantes de la naturaleza, aquí cerca hay dos importantes parques: él de la Sierra Nevada y él de Los Alcornocales. Aquí se pueden escalar montes, hacer caminatas y hasta esquiar.
Marbella en invierno tiene todo lo que un turista desea: el sol para escapar del frío pero también la nieve a poca distancia para disfrutar esquiando, junto a la tranquilidad de una ciudad pequeña y acogedora.